- Representantes de todos los colegios miembro de Andalucía, Murcia y la C. Valenciana analizan la evolución de la campaña: preocupación por las cifras récord de naranjas sudafricanas importadas en plena campaña local, por la creciente presencia de la oferta barata de Egipto y por las consecuencias de la guerra en Ucrania sobre el mercado citrícola de la UE.
- La interprofesional crea tres grupos de trabajo: para retomar las campañas de promoción; para el estudio de la legislación europea en materia de seguridad alimentaria, sanidad vegetal, calidad y de la competencia y un tercero para el análisis de contratos de compra-venta.
Intercitrus ha celebrado esta mañana su asamblea general en las instalaciones de la Cooperativa de Productores de Alcalá del Rio (Sevilla). Era el escenario perfecto para reafirmar así la unidad en torno a esta organización, que integra a los productores y comercializadores de naranja y mandarina de todo el país y en la que, por todo ello, Andalucía tiene un peso crucial, además de Murcia y la Comunidad Valenciana. Su presidenta, Inmaculada Sanfeliu, realizó un completo análisis de la “pésima”–dijo- evolución de la presente campaña. Una temporada que ha venido determinada por el retraso de los envíos a Europa del principal proveedor no comunitario, Sudáfrica, que comercializó un tonelaje récord de naranjas durante los meses de septiembre, octubre e incluso noviembre “con nuestra temporada ya iniciada y a precios también inusualmente bajos”. Por eso y por la amenaza creciente de la oferta barata de Egipto, que ya “inundó la UE con sus naranjas valencias” en los últimos meses de la pasada temporada y que lleva camino de repetir el mismo escenario en la presente. Más aún cuando, siguió exponiendo Sanfeliu, la guerra en Ucrania y las sanciones al régimen de Putin “podrían alterar los difíciles equilibrios entre mercados y provocar un desvío masivo a la UE y al Reino Unido del tonelaje que Marruecos, Turquía, Grecia y la propia Egipto vienen exportando a Rusia”. De ahí que “ahora más que nunca necesitemos de una interprofesional fuerte, cohesionada, con capacidad de interlocución ante Madrid y Bruselas para avanzar en materia de reciprocidad”, esto es, que todos los cítricos que entren a la UE cumplan con las mismas exigencias laborales, sociales, ambientales, fitosanitarias y de seguridad alimentaria que se exigen a los citricultores europeos.
En lo que llevamos de siglo, por otra parte, se han introducido en la citricultura española más de 16 plagas y enfermedades foráneas. Avanzar en materia de sanidad vegetal es, por ello, una segunda gran prioridad de la interprofesional. Tras más de un lustro reivindicándolo sin éxito por separado, esta campaña el sector ha logrado el hito de la aprobación, por parte de la UE, de un cold treatment a las importaciones de naranjas de todos los países que padecen la ‘Falsa polilla’. “Este logro demuestra la capacidad que tenemos si seguimos cohesionados en torno a esta interprofesional”, avanzó Sanfeliu y coincidieron en destacar otros tantos representantes en sus intervenciones. El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, por su parte, quiso remarcar también a este respecto que, pese a la ausencia unilateral de los representantes de ASAJA-Andalucía, ASAJA (nacional) está “plenamente representada” en Intercitrus y que las “puertas de la organización siguen abiertas” para su reingreso. Y al respecto del tratamiento de frío –ahora en fase de alegaciones- se remarcó la necesidad de intensificar las presiones y acción de lobby ante el Gobierno español y la Comisión Europea para asegurarse que la aplicación del nuevo reglamento se dé ya este mismo verano, cuando arranque la temporada de envíos del hemisferio sur.
Con la intención de ganar operatividad en los objetivos estratégicos definidos por la interprofesional se ha decidido crear tres grupos de trabajo específicos. De un lado, para avanzar en materia fundamentalmente de reciprocidad y de sanidad vegetal, se ha creado una comisión de estudio de la legislación comunitaria sobre seguridad alimentaria, calidad, fitosanitarios y competencia. Un grupo que, en su caso, podrá estar asistido por un gabinete jurídico especializado externo. Se pretende con ello hacer aportaciones a la nueva orientación que la presidencia de la UE a cargo de Francia –alineada con el Gobierno español- quiere dar a la política comercial europea, con la inclusión también en tales tratados de las llamadas ‘cláusulas espejo’. Del otro, ante la evidencia de que el consumo de cítricos en Europa pudiera estar resintiéndose y de que el espacio en los lineales de la gran distribución europea cada vez está más ocupado por otras frutas como las tropicales, Intercitrus va a empezar a trabajar en próximas campañas de promoción y en la redacción de una posible extensión de norma con la que financiar tal publicidad y poder solicitar las ayudas europeas existentes. En tercera instancia, se ha apostado por crear un tercer grupo de análisis de contratos de compra-venta de naranjas y mandarinas que se ajuste a lo prescrito en la Ley de Mejora de la cadena Alimentaria para dar así mayor seguridad jurídica a los citricultores.
En la asamblea general celebrada esta mañana han participado hasta 16 representantes sectoriales, con evidente protagonismo de los procedentes de Andalucía y Murcia. Además de la presidenta, que acudía también en nombre del Comité de Gestión de Cítricos (CGC) y de la propia directora de la interprofesional, María Pilar Fos, han estado presentes Pedro Gomáriz, Paco Gil (ambos de COAG-Murcia), Salvador Fernández (COAG-Córdoba), Cristóbal Aguado y Celestino Recatalá (ASAJA-Valencia) –todos ellos del colegio productor-; Francisco Bernal, Jaime Martínez, Lucia Porras, Rocío Soriano, Enrique Santos, Jesús Valencia (todos ellos de la Confederación de Cooperativas Agroalimentarias de España, CCAE, de Sevilla), Enrique Bellés y Egon Cervera (CCAE, Valencia) –todos del colegio del Comercio de Cooperativas-; Juan Manuel Bernal y Lorenzo Reyes (Asociación de Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas Integradas en el CGC-Huelva) –estos dos del Colegio del Comercio Privado Asociativo-.
Antes de iniciarse la sesión, el jefe del Servicio de Sanidad Vegetal de la Junta de Andalucía, Rafael Sánchez Trujillo, informó a los asistentes sobre las medidas incluidas en el Plan de Contención de esta región para evitar y en su caso detectar precozmente la Trioza erytreae. Como es bien sabido, este insecto –más allá de ser en sí mismo una preocupante plaga- es el vector del HLB, la enfermedad bacteriana considerada más letal para la citricultura. El también llamado psílido africano, desde que fue identificado por primera vez en Galicia en 2014, se ha extendido por el litoral atlántico, desde Lisboa al País Vasco. Su última detección hace unos meses en zonas productoras de cítricos del Algarve lo sitúa pues a escasos cientos de kilómetros de las plantaciones de Huelva.